Mi nombre es José Pérez, pero me conocen más personas por mi seudónimo Pepito. Tengo entre 30 y 45 años y soy gerente de una empresa B2B de tamaño medio. Veo o juego de vez en cuando al fútbol, me gusta beber cervezas con mis amigos, pero estoy tratando de comer sano ultimamente. Ah, también soy nativo digital y fan de todo tipo de aparatos y cachivaches electrónicos. Podría seguir mucho más tiempo contando cosas acerca de mí, de mi esposa y mis hijos, pero en realidad me conoces ya porque…
¡Soy tu audiencia!
Abro los ojos. Una voz femenina me susurra «Son las 6:15 de la mañana». También me dice que va a haber 21 grados hoy y que no necesito paraguas. Respondo diciendo: «Música para buen humor». Entonces, me levanto despacito y sin hacer ruido para no despertar a mi mujer.
(Fuente: https://home.google.com/)
Inteligencia digital: la invasión
Al entrar en el cuarto de baño escucho mi canción favorita. Veo mi cara reflejada en el espejo todavía dormido y entonces digo: «La ducha a 38 grados», y me meto en la ducha. Treinta minutos después estoy delante de mi cafetera, que está empezando a calentar el agua. Mientras espero, me enfado porque tengo el temporizador de la cafetera mal ajustado. Al final, el café está preparado antes de salir de casa. Vierto el último resto de leche en mi termo de café y digo «Google, añade leche a la lista de la compra», a lo que contesta una voz femenina: «La leche ha sido añadida a su lista de la compra». Después de una breve pausa, continúa diciendo: «Son las 6:45 horas, el camino hasta su trabajo es de 45 minutos». Me enfurruño porque el tráfico sea tan fuerte hoy y me meto en el coche.
Después de arrancar el motor, puedo elegir una de las tres rutas que me ofrece Google. Elijo la más rápida y me marcho. En los altavoces suena la lista de reproducción que he seleccionado esta mañana al levantarme. Unos minutos más tarde, aparece el ya advertido tráfico en la carretera. Pongo mi nuevo Tesla en piloto automático y digo «Google, muéstrame las noticias de hoy». La voz responde: «Aquí están las noticias del 15/07/2021». En la pantalla frente a mí aparecen varios artículos. Elijo el primero y la voz femenina lee el artículo para mí. Diez minutos más tarde, el tráfico se ha disuelto y me centro de nuevo en conducir. Al mismo tiempo, escucho mis correos electrónicos y dicto las respuestas directamente a través de mi asistente digital. Poco antes de llegar, me pregunta si quiero recibir ofertas para vuelos a Londres, porque me han mencionado «dos vuelos a Londres» en el último correo electrónico. Digo que no. A veces, estos anuncios son ya molestos.
La digitalización de los lugares de trabajo
Me siento en mi oficina. En el calendario se abre el recordatorio y me dice que un HoloCall comienza en 5 minutos. Me pongo los Hololens y me conecto para la reunión. Ante mí está la parte de fabricación que realiza nuestro Equipo de Desarrollo en Madrid. Puedo examinar todo cuidadosamente a través de la representación holográfica. Mis ingenieros tienen marcados los cambios con una flecha holográfica. Estoy satisfecho con el trabajo, así que les digo que me envíen los archivos para la impresión en 3D. Mientras espero que el prototipo se imprima, saco el teléfono del bolsillo. Es la primera vez que lo tengo hoy en las manos. Le pregunto al dispositivo: «¿Dónde está mi paquete?» Google sabe que pedí una nueva sudadera por Amazon Air Pad anoche y dice: «Su paquete llegará hoy a las 14-15 horas, como había solicitado. ¿Le gustaría recibir una notificación cuando llegue?. Contesto «Sí» y me dedico de nuevo a mi trabajo.
(Fuente: https://www.microsoft.com/microsoft-hololens/en-us/commercial)
A continuación, llevo nuestros prototipos recién salidos de la impresora 3D a la sala de conferencias para el cliente, que está muy contento. Deja encargadas 100 piezas para una primera prueba de funcionamiento y me dice que necesita las partes tan pronto como sea posible. Este encargo no se puede procesar lo suficientemente rápido para nuestra empresa de transporte habitual, así que vuelvo a la oficina y le pregunto a mi teléfono: «Google, llama a la mejor empresa de transporte en Madrid.» La voz de la mujer responde: «Aquí tiene una lista de las empresas de transporte de Madrid clasificados según las valoraciones de los usuarios. ¿A cuál desea llamar?» Hago clic en el primer resultado, me encanta que la búsqueda de información sea tan rápida y efectiva.
Todo el día en la nube
Hoy nos han invitado a una barbacoa con unos amigos. Así que después del trabajo vuelvo en coche, que me recuerda rápidamente que mi paquete de Amazon Air Pad ha llegado una estación de drones. De camino a casa, dicto rápidamente los elementos que faltan de la lista de la compra: dos barras de pan, salsa, bebidas, ensalada… y creo que no me dejo nada. Google me pregunta si quiero guardar la lista y respondo «guardar lista como Productos para la barbacoa». De repente, ¡pam! un ruido fuerte y me aparto de la carretera. La pantalla me indica que el neumático trasero derecho se ha pinchado y me pregunta si quiero informar al seguro o si prefiero ir a uno de los cuatro talleres más cercanos. Como no tengo rueda de repuesto, pruebo a llamar al taller más cercano y, después de una breve llamada telefónica, el mecánico me informa que llegará en 15 minutos con la rueda de repuesto. La rueda es rápidamente reemplazada, pero de todos modos dejo el coche en el taller para ponerle nuevos neumáticos.
(Fuente: https://www.android.com/intl/de_de/auto/)
En mi aplicación para compartir coche busco el próximo coche disponible y voy al súper para recoger la compra pagando con el teléfono móvil, por supuesto. De camino a casa, me paso por mi carnicería favorita. Al entrar, escucho «Hola Pepito! ¿Cómo estás? «» Todo genial, Javier»contesto, «Tenemos organizada una barbacoa para esta noche, ¿me puedes recomendar algo?» y Javier me muestra unos filetes de unos 4 cm de grosor, y me cuenta acerca del origen y la calidad de la carne. Nos conocemos desde hace cinco años y yo solo compro carne en su negocio. Como siempre, me siento bien aconsejado, compro la carne que me recomienda y me vuelvo a casa.
¿Qué es mejor: buscar para vivir o vivir para buscar?
Mi pequeña historia muestra lo que podría ser un día normal dentro de unos años. Particularmente, quiero hacer hincapié en la interacción entre el hombre y la máquina (de búsqueda). El lector habrá notado que no ha sido José el que ha llevado una búsqueda activa para algunas situaciones, sino que ha sido el mismo Google quien ha asumido directamente ese esfuerzo. A través de los smartphones, coches inteligentes, aplicaciones, comandos de voz y respuestas a la búsqueda activa, la búsqueda de Pepito se reduce al mínimo. Supongamos, por ejemplo, la búsqueda de un taller. El coche inteligente detecta el fallo en sí (el pinchazo) y proporciona las soluciones adecuadas (aparcamiento a los alrededores), por lo que deja de ser necesario una búsqueda más activa por parte de Pepito. Otro ejemplo es la pregunta «¿Dónde está mi paquete?» Debido al historial de búsquedas de Google, los resultados serán siempre personales y dentro de nuestro contexto diario.
¿Y por qué os cuento todo esto? Bueno, porque hay gente que todavía piensa que el SEO es únicamente la optimización de un sitio web con una sola palabra. Esta pequeña historia tiene la intención de demostrar que la visibilidad en Internet será cada vez más y más dependiente de otros factores en el futuro. Internet es todavía muy joven y pronto la optimización será totalmente diferente. No hay más que mirar al pasado y recordar que teníamos que registrar las empresas en el directorio telefónico con la keyword correcta. Internet siempre funcionará más y más rápido y esto debe aplicarse también a la comercialización digital. Un buen SEO debe aumentar la visibilidad del sitio web sin centrarse únicamente en las búsquedas activas.
El sitio web debe aparecer en sugerencias de resultados automáticamente así como en todos los dispositivos (teléfono, casas inteligentes, coches, etc.). Además, es bueno acostumbrar a tu audiencia a disponer de las últimas tecnologías utilizadas (Chatbot, realidad virtual, datos de marketing, etc.) y ofrecerles rápidamente la información de mejor calidad junto con los contactos individuales que ellos necesitan. Aunque todo el público debe ser tenido en cuenta, en algunos casos -como las empresas B2B-, el SEO y el marketing deben evolucionar juntos en el futuro.
Y esto se lo recomendaríamos de igual modo a Javier, el carnicero. Él no tiene ninguna tienda online y, sin embargo, su carnicería siempre tiene una clientela fija. Esto se debe principalmente al trato cercano y personal que tiene con el cliente así como su pasión por los buenos productos y calidad. Estas son cualidades importantes de las que se puede sacar «tajada»(de unos 4 cm de grosor) en Marketing Digital si se propone digitalizarse en un futuro no muy lejano.